La presencia de líquido libre alrededor del testículo recibe el nombre de "hidrocele" y consiste en una inflamación de las diferentes capas que recubren al testículo, ya sea por algún golpe recibido, infección, o incluso de manera espontánea.
Para algunos enfermos resulta motivo de preocupación porque suele confundirse con un tumor testicular. Nosotros podemos establecer la diferencia mediante una revisión a la consulta o por la realización de un ultrasonido. Para poder resolver el hidrocele siempre será necesaria la cirugía.
Es necesario que el paciente permanezca una noche hospitalizado, aunque algunos enfermos que toleran muy bien el dolor pueden ser dados de alta el mismo día. No hay necesidad de retirar puntos porque empleamos suturas especiales que se absorben por sí solas en el organismo.